Todos los jueves, recorro el mismo camino, veo las mismas casas que habita la misma gente. ¿Qué mundo encerrará cada una? Detrás de cada puerta, un universo entero, un universo en sí mismo, con sus misterios, sus mentiras, sus verdades.
Siempre me intrigó qué pasaría puertas adentro, no por mezquina curiosidad sino por verdadero interés. Lástima que, a menos que me inviten a pasar, nunca lo sabré. Solo echo a volar mi imaginación. Además, es lo mejor. Podría descubrir cosas desagradables. Seronoser
Siempre me intrigó qué pasaría puertas adentro, no por mezquina curiosidad sino por verdadero interés. Lástima que, a menos que me inviten a pasar, nunca lo sabré. Solo echo a volar mi imaginación. Además, es lo mejor. Podría descubrir cosas desagradables. Seronoser
Esa pregunta es la que permite aceptar que cada casa es un mundo.
ResponderEliminarCuando veo pasar al mercadillero de los miércoles por mi calle, o cuando todos los viernes voy a un sitio concreto, pienso lo mismo que tú. Pero me da por creer que pueden pasar cosas muy divertidas.
Seguramente porque vemos personas diferentes a las habituales de nuestro barrio o pueblo.
Me ha gustado.
Un saludo.
Muchas gracias, Albada. ¡Es mi primer relato! Y espero inspirarme muchas veces más.
EliminarSaludos.
¿Y si te invitaran a pasar? ¿Aceptarías vivir sus historias y formar parte de ellas? Vivir en secreto sus historias paralelas como quien observa una película... Bienvenid@ Seronoser
ResponderEliminarBienvenida Seronoser, ¡nos encantará leerte!
ResponderEliminar¡A ver qué pasa!!!
EliminarLos jueves milagro!
ResponderEliminarUn saludo.
En mi ciudad, todos los jueves, de menú del día, paella. ¿Y qué tenemos el resto de la semana? Depende. En ocasiones, misterios por descubrir, a veces agradables, a veces no. Como en este microrrelato.
ResponderEliminarTodos los jueves me asomo a la ventana y veo pasar a las mismas personas. ¿Qué mundo llevarán en sus invisibles mochilas? Una mezcla de curiosidad e interés me atrae hacia sus cuerpos y a sus almas, intentando penetrar en sus misteriosos y profundos laberintos interiores. Ser o no ser, en este caso, esa es la respuesta.
ResponderEliminarUn saludo
country49
Me sorprende el interés que siempre nos despiertan las vidas desconocidas, tanto más, cuando la mayor parte de las vidas atisbadas (núnca conocidas del todo) no nos intrigan en absoluto.
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