Como cada verano llegamos en tropel besándonos y riendo. Cargamos con un año más, algún desengaño reciente y un par de arrugas nuevas. Hoy, sabemos cosas que antes ignorábamos; por ejemplo, que los veranos por vivir son limitados y hay que aprovecharlos, que no somos, ni seremos ya, los que pretendíamos y que las cosas importantes son pocas.
Pero ¡Qué demonios! somos los que fuimos y nos reunidos como siempre para divertirnos, disfrutar los unos de los otros y brindar por lo que está por venir.
desasosegada
Pero ¡Qué demonios! somos los que fuimos y nos reunidos como siempre para divertirnos, disfrutar los unos de los otros y brindar por lo que está por venir.
desasosegada
Las nuevas arrugas alardean.-Es que me reí mucho. dice una de Ana.
ResponderEliminar- Pues yo disfruté de la nieve- dice la de Berto.
- Pues no es por molestar, pero yo estoy menguada, porque anduve por la Dermoestética- luce la de Carla.
Con Zoe enredando con las hilachas de sus sandalias, acaban de iniciar el reencuentro del verano.
Si te parece. Un saludo.
Claro que me parece!!!
EliminarEspero que tu también tengas la suerte de conservar a los viejos amigos.
Un beso.