miércoles, 15 de septiembre de 2010

In vino veritas

La oscura bodega rezumaba humedad. El enólogo dejó la copa en la mesa. -¡Un vino excelso! ¿Cúal es su secreto? El bodeguero replicó, sonriente: -Hacemos sacrificios. -Mucho trabajo, ¿no? -Sí, trabajo...y sacrificios, respondió, mientras unas sombras aparecían tras las barricas.

Por Hank66


1 comentario:

  1. Por cierto, hank, no te lo comenté, pero el relato del vino amontillado de Poe que me recomendaste en su día cuando hablamos de este mr en Eskup, me encantó. La sensación que tuve es que iba creando el clima de quéfríoenlaespalda sólo con el hecho de hablar de las tumbas y los huesos del cementerio familiar, instalado en la bodega, me parece que eso es lo que realmente aterra, más que la preparación de la muerte del otro. Y repito, este mr es muy bueno.

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