miércoles, 15 de septiembre de 2010

MIERCOLES

Somnolienta, me arrellané en el autobús, dispuesta a dar rienda suelta a mis sueños.

De pronto, al abrirse las puertas, apareció .... él y la vida se iluminó.

Bajé en mi parada notando que me taladraba su mirada.

Sin pensarlo, eché a correr tras el bús y logré alcanzarlo, dentro sólo me esperaba un anciano con bigote.

Era miercoles.

Desasosegada.-

1 comentario:

  1. Es lo que tiene el término medio vigilia/sueño...

    (Se te ha olvidado la ventana!)

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