miércoles, 27 de octubre de 2010

Amenaza

Soy la sombra a la que pisas en cada paso. Imaginame... arrastrada, gris, distorsionada y reducida a dos dimensiones. Logro escapar a tu desprecio y no permito un segundo plano. Algún día se hará la luz en este mundo al revés. Cuando llegue ese momento apaga la tuya y huye en la oscuridad. Entonces sabrás de mi sufrimiento. Sólo así podrás evitar que mi mano agarre tu tobillo y te sumerja en mi mundo para siempre.

Alsquare

3 comentarios:

  1. papelylápiz27/10/10, 18:50

    Buena metáfora. El que tiene la suerte de estar entronado, debe tener la sabiduría y la sensibilidad para el reconocimiento de sus inevitables "sombras", que son las que sacan las castañas del fuego.

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  2. Me gusta, Alsquare. Yo interpreté la historia literalmente. Casi puedo verlo intentando huir mientras la sombra coge su tobillo...

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  3. El mundo de las sombras tan metafórico y real a la vez. Todos tenemos nuestras sombras. Podemos llegar a hacernos sombras de nosotros mismos aun sin quererlo. Las sombras de nuestra vida que nos acechan. Gracias a los dos.

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