21
Espacio de creación de microrrelatos,
cuentos cortos y otras formas de
literatura breve, al acceso de cualquiera.
sábado, 13 de noviembre de 2010
Veintiuno
Nací escoltado, con prisas, aquellas que nos da, la curiosidad. Un frio 21 de enero. El mes de las promesas. Mi nombre tiene santo de un 21 de julio. Aquél que no temía a nada, siquiera a los leones del Atlas. De niño, en clase, atendía al orden veintiuno. Ritmo marcado por acontecimientos. Cada vez que firmo, miro la fecha y está ahí, siempre presente. Me apodan Belcebú, aunque yo no venero dioses ni demonios. Solo disfruto de un tiempo que me pertenece. La noche exalta lo mejor y peor de mi
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Me gusta tu relato 21, original y curioso el tema. Y, como sabes muy bien relatar... Saludos.
ResponderEliminar@Marsa
ResponderEliminarGracias, Marsa. Lo empecé como un simple juego. Me han preguntado varias veces a que obedece mi pseudónimo. Intento explicarlo un poco, a mi manera. Sería interesante que cada uno de nosotros habláramos de ese nombre o falso nombre bajo el cual escribimos y expresamos parte de nosotr@s. Nuestro perfil anónimo sería más humano.
Y yo quiero brindar en esta esquina por este escritor siempre entrañable y con calidad de página siempre a gran altura, que decía Ortega. Amén de un comentarista y analista literario de primer orden y una de las brillantes almas que sostienen este tenderete. Creo que hoy somos viuntiún miembros en Relatarium y algo tendrá que ver también con tu nombre.
ResponderEliminar@gabrielpalafox
ResponderEliminarEs un verdadero honor para mí, recibir esa cantidad de energía en forma de alimento y más cuando parten de todo un ejemplo, que cualquiera que ame este mundo de palabras quisiera reflejarse. Me siento a gusto aquí, con todos vosotros y me parece tan importante escribir un relato, como apoyarlo y comentarlo, haciendo sentir vivo al que lo escribe. Tratar a los demás como quieres ser tratado es un ideal, que a veces se puede cumplir y eso es estar cerca de donde quieres estar.
Te saludo, acuario, compañero de trayectorias estelares, sobre todo, por ese "Solo disfruto de un tiempo que me pertenece" que entiendo y suscribo.
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