lunes, 20 de diciembre de 2010

Cuento de navidad

Observaba pensativo la pista de hielo.
Cuando salían juntos elegían "un patoso" y observaban sus torpes evoluciones entre risas y codazos.
Hoy no podía reírse, veía a "los patosos" felices, divirtiéndose con los suyos, mientras él les miraba envidioso, solo.
En un arranque de decisión se lanzó a la pista, braceó como un molino mientras los pies divergían de forma irremediable.
Entonces oyó una risa franca y vio su mano tendida hacía él.
En el abeto central se encendieron las luces de navidad.

desasosegada


1 comentario:

  1. Qué buen relato desasosegada. y qué potente la imagen de las luces encendiéndose con la sonrisa.
    Me ha encantado. Enhorabuena.

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