lunes, 20 de diciembre de 2010

Divorcio

Una vez que había reunido a todas sus tropas, las arengó a partir hacia sus orígenes. Ya no tenían nada que hacer allí. Con gesto cansado, aunque determinante, hicieron saber a la dueña de aquellas tierras, de su partida sin remisión alguna.
Los territorios comúnmente conquistados, acordaron ser visitados y organizados por ambos. Ella, no dijo nada. Su silencio certificó el común acuerdo.
Entrando en sus tierras lentamente, advirtió la dejadez y el desamparo reinantes por tantos años de entrega.

21


10 comentarios:

  1. La vida,a veces,tiene sabor amargo. Por eso hay que aprovechar al máximo los pequeños buenos momentos...
    Me gustaron las metáforas, 21
    besos

    ResponderEliminar
  2. Buena metáfora, 21. En el amor como en la guerra, después de la conquista puede venir la separación y el reparto de tierras (éstas a menudo desvastadas...)
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  3. @Íngrid
    Gracias Ingrid. Es bueno recodar como bien dices, que los buenos momentos hay que disfrutarlos tanto como te puedas permitir vivir, no hay que guardarse nada. Estamos en directo y escribimos día a día el camino que pisamos. Tenemos que ser sinceros con nosotros mismos, esto solo va a suceder una vez. Un beso para ti.

    ResponderEliminar
  4. @Sara Lew
    He querido explicar, como bien dices, Sara. Cuando queremos demasiado a alguien, tenemos tendencia a abandonar nuestras vidas, (o tierras), para vivir en las tierras que la persona amada y esas tierras pueden crecer y ya son de los dos, ¿pero, y tus tierras, lo que tu eras, eres y serás, dónde quedó? y al pensar esto, reúne a su ejército, (todos sus valores e ideas) y parte rumbo de donde partió. Más o menos por ahí anda. Un saludo, me gusta mucho como escribes y encima lees a todos. Un placer.

    ResponderEliminar
  5. Estoy encantado con este folio que llevo, oye. Qué buenos relatos os han salido ...jodíos ;-)

    ResponderEliminar
  6. Veintiuno, qué bien abordas el dilema de la entrega en el amor. Sería muy triste que además de perder un amor te hubieras perdido a ti mismo. Pero cuántas veces pasa, nos pasa. Saludos

    ResponderEliminar
  7. @Inopio
    Los tuyos son realmente buenos y especialmente originales por el contexto y sus peculiares personajes.
    Saludos, Inopio.

    ResponderEliminar
  8. @gabrielpalafox
    No me gustan las "medias" actuaciones, Gabriel. Cuando voy a por algo o alguien, suelo hacerlo por tierra, mar y aire. Con estas perspectivas es obvio que mi mundo se queda huérfano de gobierno y he querido expresarlo de una forma marcial. Gracias por leer con tanta atención.

    ResponderEliminar
  9. Qué gusto leerte, 21. No importa si el regusto es amargo, como en este relato, o dulce, como en otros.

    ResponderEliminar
  10. @tapia
    Gracias, Tapia. Es un orgullo añadido además de ser leído el ser comentado por personas que se manejan tan bien en la expresión como es tu caso.

    ResponderEliminar