jueves, 26 de mayo de 2011

El león pirata

Le llamaban Pep.
Con seis dioptrías por banda, viento en popa y a toda vela, abandonó el sumidero de las noches perdidas y de los llantos sin fondo, y abrió los brazos hasta donde sus dedos le permitían.
Fijó el rumbo que su corazón había decidido. Marcó las coordenadas sobre el mapa con firme presión, subió al puente de mando y, virando al este el timón de sus instintos, se hizo a la mar.
Por primera vez

Albada

Blogged with MessageDance using Gmail | Reply On Twitter

6 comentarios:

  1. Albada, me quedo un poco con la duda de si esa singladura era para bien o para mal. Claro que, así, queda un texto más abierto...
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Gabriel Palafox28/5/11, 22:42

    Original. Me ha encantado el "sumidero de las noches perdidas"

    ResponderEliminar
  3. Empezar una nueva vida... no hay dioptrías en el mundo que lo impidan si la voluntad es fuerte. Precioso.

    ResponderEliminar
  4. Gracias Luis.Para bien o para mal...solo el tiempo lo puede saber
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  5. Gracias Gabriel. Hay sumideros de noches negras como la noche.Me alegre te gustase la expresión.
    Venga, que la emoción de los estrenos es siempre estimulante como la adrenalina de los miedos.
    Un abrazo

    ResponderEliminar