viernes, 28 de diciembre de 2012

Musas esquivas

En el colegio, todos niños fabulaban sobre el futuro; hoy querían ser bomberos y mañana policías. Pero él no, él lo tenía claro: iba a ser ESCRITOR.
Estudió, se formó, incluso se impuso un look bohemio acorde a su condición.
Todo iba perfecto, salvo un pequeño detalle, ante una página en blanco sólo lograba sudar.
Se impuso un horario, pero dio igual… nada.
Frustrado y desesperado decidió acabar con su vida.
Justo en el momento de saltar al vacío se le ocurrió una idea ¡Demonios, era la inspiración!
desasosegada

1 comentario:

  1. Una inocentada? La musa es algo caprichosa para este escritor...


    d.

    ResponderEliminar