viernes, 6 de septiembre de 2013

A verano pasado

Ha pasado el verano, donde recargar las lunas en el pelo, y renovar de poesía salada la mirada.

He visto cómo se han aunado esperanzas y deseos, trenzadas a noticias de pobreza en diferido. Un plasma llegó a dejarme atónita, sintiendo la inclusión de escarcha en las venas. Sentí con ello, algo de organismo tocado por la podredumbre y el desapego.

Imágenes inhumanas de coágulos por digerir han trastocado a las siestas y a los abanicos, dejando un hedor a muerte sinsentido.

La luna hoy está callada. Observa cómo nos pondremos a abonar los campos de nuevos sueños, con quimeras más cercanas al corazón de la noche.

Ya pasado el verano, el otoño nos espera, con mil colores, al otro lado de la puerta.



Anónimo

lunes, 2 de septiembre de 2013

Gregorio Samsa, supongo

Huelo a rosas, no sé de qué color porque está oscuro, casi negro, pero son rosas. También percibo el relente húmedo de la tierra agitada y la eclosión de nuevos moradores, alquimistas de la materia, que han empezado a cuchichear muy cerca de mis antenas, ¿O todavía son oídos?

No me asusto, no tiemblo, ni siquiera intento girar la cabeza para no escucharlos, porque ya descubrí, hace unas horas, o quizás sean días, que no puedo moverme. Tengo la certeza de que la sangre no me circula, que no dispongo de actividad cerebral, pese a estos destellos torpes de los sentidos que, obstinados, se aferran a sus últimos estímulos.

Me cuesta aceptar que aún sigo vivo, que la metamorfosis no ha concluido del todo y que, aún, quedan larvas carroñeras dispuestas a profanarme. Finalmente, al paso de sus invertebrados cuerpos, la mandíbula se me descuelga y, con su peso de materia invertida, dibuja una sonrisa erosionada al sentir que todo va desaparecer.

A m i espalda, el vértigo del río arrastra gusanos sorprendidos de que, aún mi alma, se aferre a un trozo de carne descompuesta con olor a polen.

http://montesinadas.blogspot.com.es/

Manuel Montesinos

Mis viejas botas de monte

Hay algo en los zapatos vacíos que me conmueve.

Ese calzado que reposa en una estantería torcido irremediablemente hacia la derecha o dado de sí en el empeine, nos dice tantas cosas de las andanzas de sus dueños…

Un zapato abandonado en la carretera me da sensación de desastre y en el campo de desorientación.

Así que hoy, cuando me dispongo a deshacerme de mis viejas botas de monte no puedo remediar acariciarlas brevemente. Me han acompañado por caminos y veredas, han sudado conmigo en subidas despiadadas y sufrido innumerables aguaceros. Pese a ello siempre parecen en forma y dispuestas a acompañarme.

Por eso ahora, que me despido de ellas para siempre, quiero rendirles un homenaje como solemos hacer cuando hemos de separarnos de compañeros queridos.



desasosegada

domingo, 1 de septiembre de 2013

RELATARIUM REGRESA DE VACACIONES

RELATARIUM ha regresado de unos días de asueto.

Muy a nuestro pesar la resolución de los problemas que causaron que RELATARIUM no estuviera disponible, ha ido más allá de lo deseable, pero afortunadamente RELATARIUM está de vuelta.

No estamos exentos de que la plataforma que produjo el parón vuelva a hacer de las suyas, pero hemos ideado alguna solución alternativa si así sucediera.

Os agradecemos vuestra paciencia y que hayáis hecho uso de esta vuestra casa como lectores durante estas semanas.

Es posible que notéis algunas pequeñas diferencias sobre el funcionamiento previo de RELATARIUM; son menores. Nos habría gustado hacer algunos cambios más amplios, pero será en otra ocasión. Continuad dejandonos vuestras sugerencias en el pestaña "Renovándonos".

Un abrazo literario

PS: Hank, aguardamos tu relato que conjure la maldición de "Atrapados en el tiempo"

280 y punto