lunes, 30 de octubre de 2017

Sonrisas de post.realidad

Le ofrecieron la luna y ella puso en su falda una sonrisa. Buscó escenarios, paseando por la ciudad de las consignas y se detuvo ante dos ventanas ciegas de un blanco edificio, de la calle Siesta, cercana a la Plaza de las mentiras por desentrañar.


Estuvo ahí posando hasta que un tipo le preguntó el porqué de su sonrisa. En ese momento ella dejó sus manos libres y la falda se puso a ondear ante un viento de dudas, pero el fotógrafo había captado e inmortalizado a la mujer sonriente, la de la post-realidad.

albada

2 comentarios:

  1. Sugerente relato, donde una falda ondea como bandera de la realidad soñada.
    Un beso.

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  2. Intencional ondear de la falda tras haber estado sujeta. Hay sonrisas sujetadas con alfileres, y otras que quedan en el rostro cuando lo que la produjo, se evaporó

    Un abrazo

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