La Señora Presidenta de la Comunidad le instó a cortar el seto, excesivamente alto según ella. Mariano redujo su altura pero no fue lo suficiente y tuvo que recortarlo varias veces hasta quedar al ras del suelo. Después, Mariano, aún con la podadera en la mano, se vió obligado a cortarle el pescuezo a sus gallinas, cuyo cacareo molestaba a la Señora ¡Su hijo hace mucho ruido! Añadió la Presidenta. Mariano, con decisión y afilando la podadera, llamó al pequeño, quien se acercó esperando un beso. country49
Magnífico cuadro de la realidad. A Hank le va a encantar, ya lo verás.
ResponderEliminarNo sé a Hank, porque sabemos que se pasa poco por aquí, pero está en su línea de gustos, creo.
ResponderEliminarA mí, country, me ha gustado la forma tan sarcástica de ver lo que está pasando en esta España siempre tan especial, hasta en la sumisión.
Un abrazo.
Pues sí, me ha encantado, aunque a estas horas de la mañana se me había pasado la metáfora política y sólo había leído un estupendo relato de humor negro que ya de por sí funciona muy, pero que muy bien y que me ha causado cierta envidia. Despúes de releerlo, metáfora incluida, todavía gana más. Mis felicitaciones. Y a vosotras, Marga y Albada, un beso y mi agradecimiento por tenerme presente.
ResponderEliminarMariano espera impaciente nuevas instrucciones - órdenes- de la Presidenta, por cierto de nombre Ángela, para ejecutarlas sin dilación, mientras limpia con la manguera la sangre que afea su jardín. A través de la ventana observa a su abuela cuyos ronquidos pueden que no sean del agrado de la -SU- Presidenta.
ResponderEliminarUn saludos a todos los "comentantes"
country49