sábado, 16 de octubre de 2010

Aullidos

Las sombras me acechan constantemente. Pero cada vez que la luna se llena las noto más cercanas, percibo casi su aliento. Cada plenilunio pienso que será el último, que no voy a sobrevivir a otra noche de caza. Debo buscar ayuda, aunque sé que va a ser difícil encontrar a alguien que confíe en mi. La licantropía nunca ha estado bien vista.


Cronopio


11 comentarios:

  1. Me gusta, cronopio. Aunque me parece un poco obvio el final, ya que se percibe que es un licántropo en la primera frase. Saludos.

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  2. La licantropía es apasionante, me gusta el relato, la puesta en escena desde el principio hasta el final, transmite la metamorfosis del personaje, la esencia del relato. Si yo pudiera te daría esa ayuda. Buen relato cronopio

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  3. Es una versión muy apreciable de "la ternura del monstruo" y como puedes ver hay corazones que la perciben

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  4. Gracias por vuestros comentarios, Sara, Anamaria y Jose Javier. Intento darle la vuelta a los tópicos, y las leyendas de hombres lobos me apasiona desde pequeñito, la verdad. Respecto al comentario de Sara, quizás tengas razón, pero me apetecía que este relato fuera menos críptico, para lograr transmitir ese punto de ternura del que habla jose javier. No sé si lo habré logrado, pero esa era la idea.

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  5. Lo has logrado cronopio, ver desde el principio al licántropo desde su aullido hasta su mutación, a mi personalmente me hace ver su lucha interna y como me apasionan los hombres lobo, sería un placer leer la continuación de este relato. Saludos.

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  6. Vaya, gracias Anamaria. Me encanta que compartamos la pasión por los licántropos. ¿Por qué no te animas y escribes tú la continuación?. Sería estupendo ver tu punto de vista sobre el tema. Un abrazo.

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  8. Veo que me precipité al escribir mi comentario después de una simple lectura a tu relato. Buscaba en él el misterio. Y ahora sí que lo encuentro, pero es diferente y personal ¿Cómo sobreviviría un hombre lobo en esta sociedad? ¿Podría hablar de ello con alguien? Es bueno, cronopio. Sabes que me gusta como escribes.

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  9. Gracias de nuevo, Sara, por leer y, más aún, por releer lo que escribo.

    Creo que cada vez que releemos algo, sea lo que sea, le damos una interpretación diferente a la primera vez que lo leímos. A mi, al menos, me ocurre. Esa es parte de la magia de las letras.

    Por otro lado, el problema que tan bien resumes en tu último comentario, al fin y al cabo, es algo que afecta a todo el que se siente diferente (por la razón que sea) en esta sociedad nuestra, que tiende a premiar lo estándar y a marginar "lo distinto", y merece la pena, creo, pararse a reflexionar sobre ello, aunque sea a raiz de la historia de un "hombre lobo".

    Un abrazo.

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  10. Me quedo con hombre lobo, licántropo suena algo más psicológico y yo imagino el relato real, no permitiré que ninguna bala de plata termine contigo, aunque lo de la bala es reciente, en las mitologias y leyendas antiguas se entiende que no existian esas armas, tengo que confesarte que me encuentro dividida, también me apasionan los vampiros, pero un hombre lobo es un hombro lobo, da más juego y emoción, tienes que conseguir dominar ese poder y hacer que la maldición sea un don, ¡¡¡todos llevamos un lobo dentro!!!

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  11. Algunos vampiros literarios también me han llamado la atención, pero nunca tanto como los hombres lobo. Y, sobre todo, como dices, esos hombres lobo "reales" que surgen de las leyendas populares en muchos pueblos, sobre todo en el norte de España. La maldición, la soledad a que se ven condenados, la dualidad...un tema fascinante, desde luego...

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