A medida que la espiral de frío y distancia les arrastraba al cero absoluto, fue creciendo la evidencia empírica de que, por más operaciones que se hagan, por más sumatorios que se manejen, no se puede resucitar lo que ni siquiera se sabe si ha nacido.
Cronopio
¡Qué bonito! No lo había leído en su día. Nada más complejo que la situación que describes. Me ha encantado.
ResponderEliminar