domingo, 28 de noviembre de 2010

De huellas pasadas

En esta madrugada sólo veo huellas tuyas desperdigadas a lo largo de mi vida, como esmalte sobre el teclado, una forma junto a la almohada, un gemido enquistado en mis uñas o una astilla de acento alegre entre mis palabras.

Y no deja de extrañarme la ironía de que tus huellas me conduzcan a ti pero que mis huellas no te conduzcan a nada.

Cae la lluvia en Edimburgo llevándose las huellas, borrando la página.

Eunuco


6 comentarios:

  1. Qué potentes estas dos imágenes Eunuco: "Un gemido enquistado en mis uñas", "Una astilla de acento alegre entre mis palabras. En un texto lleno de belleza y de nostalgia.

    ResponderEliminar
  2. Es maravilloso, eunuco, esa relación entre la nostalgia, las palabras y la belleza en tu forma de expresarla.

    ResponderEliminar
  3. Cada persona tiene que hacer un esfuerzo diferente para conseguir la misma meta, Eunuco. Habemos algunos que no nos importa tener que nadar mares completos para sentir lo que algunos solamente sueñan, pero las sensaciones que se sienten en ese camino, ya merecen la pena.
    Es un relato tan "a flor de piel", que me estremece el solo pensarlo.

    ResponderEliminar
  4. @gabrielpalafox
    Gracias por tu sentida lectura Gabriel, la nostalgia es un inagotable acicate a la hora de contar.

    ResponderEliminar
  5. @mirina
    Mirina hay ratos en los que la nostalgia se vuelve un leviatán incontenible y a algunos no nos queda otra que ensalzarla para en su belleza implícita encontrar un extraño consuelo. Gracias por hacerme sentir acompañado en él.

    ResponderEliminar
  6. @21
    Gracias 21, aparte de un hobby creo que muchos de nosotros utilizamos las palabras como una adictiva terapia. Es realmente reconfortante que estén ahí a nuestro servicio incansables (e inagotables). Lo mismo se puede decir del incombustible apoyo de tus sentidos entregados a nuestra lectura.

    ResponderEliminar