lunes, 20 de diciembre de 2010

Contracorriente

Los días soleados, vivo adherido a nubes y oscuridades indestructibles, y por más que me afano, no despego los pies del suelo reseco.

Los días de lluvia, planifico saltos y danzas rituales que me ayuden a evitar el gris y a exprimir el paisaje licuado.

Los días en que la niebla lo cubre todo, me empeño en deshacer dudas y azares, en desmarañar ovillos enquistados.

Y los días de tormenta, me aplaco, me calmo, hiberno en un sueño manso y pacificador a la espera de tiempos mejores.

Cronopio


3 comentarios:

  1. Buen micro, aunque veo que hay un "Contracorriente" anterior en este blog, que no tiene nada que ver con este, de otro/a autor/a.

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  2. Los días soleados te espera en el zagúan leyendo.
    Los días de lluvia te va a buscar con el paraguas antidesánimo.
    Los días de niebla te encuentra en la luz de sus faros.
    Los días de tormenta reinventa la calma.
    Un abrazo.

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  3. Muy bueno.¡Me ha encantado!.Me he identificado ahí totalmente. Un saludo.

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