martes, 11 de enero de 2011

Metamorfosis

El hastío se repetía como el eco de una gota de agua que colma un recipiente abandonado en un mismo lugar. El vacío más absoluto le hizo tomar una decisión extrema. Se embarcó para residir durante un año la estación espacial. Deshabitado consigo mismo, tomó conciencia de una vida sin gravedad. Exento de sujeciones, sus ideas y recuerdos flotaban como planos móviles fácilmente clasificables. Dispuso del tiempo necesario para ordenarse a si mismo. Cuando volvió, su familia lo rechazó: Era perfecto

21

Blogged with MessageDance using Gmail

4 comentarios:

  1. Debería existir esa opción de un lugar donde recopilar el pasado y presente para enfocar un futuro acorde con uno mismo. Y no menos cierto es que esos cambios, y si son radicales más, no suelen ser bien acogidos por los más allegados, acomodados a uno y teniendo que realizar un esfuerzo de nueva adaptación al nuevo yo.

    ResponderEliminar
  2. @Cormoran
    Así es, Luis. El personaje se agota en la rutina y esta viene precedida por la ausencia de decisiones, convirtiéndose en hastío. Una decisión extrema fulminará su presente. En el espacio exterior se encuentra tan libre sin la gravedad que le une a todo lo demás que aprovecha para poner en orden sus conocimientos y lo que realmente quiere ser y vivir. Llega a casa siendo otra persona y nadie lo reconoce provocando su rechazo. Gracias por leer con tanta empatía.

    ResponderEliminar
  3. Un viaje para ordenar, para aprender de nuevo a sentir exprimiendo todos los sentidos, una "metamorfosis" hacia un camino desconocido pero brillante, qué mágico y qué utópico al mismo tiempo!

    ResponderEliminar
  4. @Vanadis
    Necesitar apartarse de todo de una manera tan extrema, no puede tener otro desenlace que volver renovado siendo otra persona a ojos de los demás. Saludos, Vanadis.

    ResponderEliminar