sábado, 1 de enero de 2011

Una historia como tantas

Te vi la primera vez de espaldas con aquella amiga. Y ya quise conocerte. El destino nos volvió a unir. Y me quedé prendado de tu sonrisa. Para siempre.
Hemos llegado hasta aquí donde fenecen los años y nacen otros nuevos, como un inmenso campo de margaritas donde los dos acabamos diciendo sí, con nuestro pétalo en la mano.
Y cuando viene la pena negra o la distancia infinita yo me cuelgo de tu sonrisa que es como una luna que se columpia en el firmamento, segura, eterna y, sobre todo, indefensa. Porque tu sonrisa no tiene barreras, ni escudos, ni empalizadas. Solo una invitación continúa a que me adentre en tu corazón.


Gabriel Palafox

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11 comentarios:

  1. Palabras que te vuelcan al corazon.
    Alba

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  2. Anónimo2/1/11, 3:48

    Tener alguien que te inspire esas palabras...

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  3. Empezar el año, colgado de una sonrisa, es una bonita forma de comienzo, Gabriel. Me ha gustado mucho. Saludos.

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  4. La sonrisa sin barreras, escudos ni empalizadas.Esas cuestan de encontar. Son más usuales las que tienen un precio, un peaje o servidumbre.
    Excelente manera de empezar el año.

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  5. Da gusto saber que esos sentimientos existen, y creo que más que lo que pensamos, pero que la vida, referida a la sociedad y sus circunstancias, trata de hacer que los olvidemos.
    Un propósito para este nuevo año, sería tratar de recuperar estas sensaciones.

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  6. Muchas gracias Sara y Anónimo 1 y 2. La verdad es que la literatura nos permite soñar con la belleza y la bondad extrema, que también existe en la vida real, por lo menos en determinados instantes. Y esos instantes que, a veces, duran años, justifican una vida entera.

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  7. Muchas gracias Veintiuno. A veces el mundo cabe en una sonrisa. Y también todos los nuevos propósitos de un nuevo año. O todo un resumen de muchos años.

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  8. Quizás sean más difíciles de encontrar, Albada, pero yo no creo que sean menos numerosas que las otras. Quizás es que hoy todo lo cubre una hojarasca de supeficialidad y materialismo que oculta a las verdaderas joyas. Que brillan y brillan en cuanto les llega un poco de luz. Que así sea.

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  9. Cormoran, al responder a Albada, estaba diciendo, con otras palabras, lo que tú muy bien dices.
    No puedo estar más de acuerdo.

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  10. Tagore1236/1/11, 21:44

    Me encantó, Gabriel. Enhorabuena por tener la sensibilidad para describir tanto amor en este bellisimo mr.

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