viernes, 3 de febrero de 2012

DESCUBRIENDO EL HORIZOTE

Despertó en medio de la noche, quiso salir al nevado jardín con sus pies descalzos, pero descubrió una botas grandes junto al dintel de su puerta, salió y de repente la nieve tornó en blanca arena, al poco un bosque le rodeaba, luego unas altas montañas, más tarde una ciudad que no reconoció. Consiguió volver a casa, regresó a su cama aún caliente sin apenas cansancio, y retomó su sueño infantil sin saber que aquellas botas desconocidas para el, eran de siete leguas. Despertó pero ya no estaban.

JESTA


1 comentario:

  1. Supongo que las botas de 7 legüas de nuestros sueños se han convertido en la realidad en aviones, es más o menos lo mismo, pero sin magia !Lástima!

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