lunes, 10 de diciembre de 2012

SIN MÁS

Notó que le crecían dos bultos en la espalada, sentía una molestia que llegaba a doler a veces, pero no extrañeza, era, como cuando te crecen los dientes, no tienes consciencia de que te falta algo y cuando llega el momento, aparecen rasgando las encías y sin más, puedes masticar cosas ricas.
No estaba muerto, sus actos no los percibía como especialmente buenos y sin embargo, se había convertido en un ángel. Anabelmis

0 comentarios:

Publicar un comentario