viernes, 1 de octubre de 2010

SALPIMENTANDO LA VIDA

Entre sábanas revueltas y mojadas no cesaba de acunarla entre sus brazos. El fuego de sus cuerpos se había consumido como núnca en esa noche. Andrés lloraba impotente mientras se balanceaba abrazado a Maria. "Siempre decías que había que salpimentar la vida para que pareciera fuegos artificiales". En el suelo restos de papel de colores y la última pastilla de éxtasis, olvidada de la ajetreada noche, daban fé de que el condimiento había sido excesivo.
Tagore123

11 comentarios:

  1. Duro, contundente y tierno a la vez. Muy bueno.

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  2. Estupendo de principio a fin. Enhorabuena.

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  3. @Sara Lew

    Te agradezco el comentario. Me da alas para seguir en la brecha.

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  4. Coincido con hank y saryle, tagore, es muy bueno

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  5. En cierto modo me recuerda a una escena de "Trainspotting", con la muerte de un bebé después de unos chutes

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  6. Muy intenso Tagore... fantástico. En un cuento como éste dónde sólo hay dos protagonistas (él y ella) que nos transporta a toda una vida entre dos, ¿sería más universal prescindir de los nombres propios?

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  7. @280 y puntoPerdona Tagore... era mío el comentario

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  8. @280 y punto

    Quizá tengas razón, pero preferí hacerlo mas intenso, mas cercano, personalizando en dos nombres. Me has hecho pensar, asi que, gracias. Y gracias por la felicitación, Alsquare.

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  9. @cormoran
    Perdona mi incultura, supongo que me hablas de una película. Pero no la he visto y no sé de que va, ni quienes son los actores. Aunque como para eso existe el google, voy ahora mismo a enterarme. Gracias por comentar. Un saludo.

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  10. @mirina

    Se agradece Mirina. Un abrazo.

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