Él no era idiota, pero su cerebro se irradiaba desde infinitos centros. No se podía mantener con él una conversación, y acompañarle en sus absurdos periplos era insufrible. Murió en la horca, y era el único entre los reunidos que no sabía por qué lo mataban.
Heartguitar
El desdoblamiento múltiple de personalidad nos lleva a secundar acciones e ideas que ni sabemos por qué. ¡Pero no intentes explicárselo!... No lo entendería. Saludos, Heartguitar.
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