martes, 21 de diciembre de 2010

Cuento de Navidad

Les aseguro que hice méritos para ser la Virgen en el belén del colegio, pero Inés Gómez que era monísima y una “santa” a juicio de las monjas, lo acaparó todos los años. Así que me tocó ser pastora.

La cena de navidad fue un éxito, orgullosa, cogí la moto y me dirigí a casa, entonces apareció aquella curva.
En el quirófano unos ojos azules me dijeron: “No se preocupe, todo irá bien” escudriñé aquel rostro y reconocí a Inés.
¡Caramba, por una vez las monjas habían acertado!
desasosegada

Blogged with MessageDance using Gmail

0 comentarios:

Publicar un comentario