jueves, 16 de diciembre de 2010

La residencia

Mi padre está mayor, muy mayor. Cada día más. Cuando lo veo en la residencia me enternezco. No se entera de casi nada el hombre, con la enfermedad degenerativa que tiene.
Yo le dejo hacer. Me echa el azúcar en el café y hasta me coloca la servilleta. Como cuando era un niño. Pero ya no nos podemos comunicar. El está en su mundo.
Cuando termina la visita cruza la verja y se va. A su mundo, como digo. Aunque nunca entiendo por qué yo me quedo a este lado. De la verja.


Gabriel Palafox


13 comentarios:

  1. Gabriel, dramática reflexión muy bien contada. Me ha gustado mucho, tiene intensidad desde el inicio y aumenta a medida que se lee. Buen relato.

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  2. ¡Qué buen relato, Gabriel! Está bien narrado, tiene fuerza, algo de intriga y profundo mensaje.

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  3. Enhorabuena, Gabriel. Bellísimo y desgarrador.

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  4. Muy conseguido, Gabriel. Cada vez le coges más gusto a los diferentes registros y con eso ganamos todos los lectores.

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  5. Muchas gracias, Alvaro. Yo también estoy bastante satisfecho de este mr. Gracias por leerme. Saludos

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  6. Brutalmente agradecido Rodia. A mí también meha gustado que a ti te haya gustado. Saludos

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  7. Muchas gracias Sara por tu comentario. Y por leerme. Yo también tge sigo de cerca. Saludos

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  8. Muchas gracias Ignatius por tu caluroso comentario. Un saludo

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  9. Muchas gracias Eglon por tu comentario que me anima mucho a seguir indagando y explorando en esta afición marvillosa que compartimos. Un saludo

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  10. Muchas gracias Veiuntiuno, como siempre, por tus comentarios. Intento cosas nuevas para mí. Y a veces estoy más afortunado y otras menos. Este mr. particularmente me gusta mucho. Creo que es sencillo y fluye con naturalidad. Un saludo

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  11. No añado nada que no haya sido ya comentado. Me sumo a la felicitación por tu micro. Y añado la felicitación por sentirte satisfecho, ¿quizá porque pusiste todo tu sentimiento?. Por supuesto!

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