sábado, 5 de marzo de 2011

Infortunado

Compró bosque, castillo y princesa. Aún así ni siquiera consigue que la malvada reina lo trate con el respeto debido a un príncipe azul

Patricia Nasello

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Su media naranja

El tiempo quedó atascado doblando la esquina. La vió disfrazada de muñeco de nieve, volvió a mirarla y concluyó que jamás hubo media naranja que buscar: Que era mejor dar al azar la opción de hallar una naranja entera, para rodar con ella hasta el amanecer, hasta el anochecer o hasta la próxima esquina.


Albada

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Miradas

Desarrolló la empatía en los largos trayectos de metro, contemplando la vida de los viajeros en sus miradas. Desasosegadas en los más casos, desde lo profundo de su corazón trasladaba ternura, calidez y comprensión.

Aquella joven de ojos verdes se le resistía. La recordaba vagamente desde que iba al colegio. Sus miradas se escudriñaban hasta la última parada. No podía sospechar que en el tumultuoso silencio del vagón ella vaciaba de su alma la tristeza de las historias ajenas.

Alsquare

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viernes, 4 de marzo de 2011

Amistades interesadas

Aún puedo recordarte sentada en la escalera de la universidad, esperándome.
Nunca fuiste mi tipo, te lo confieso abiertamente, pero... algo le pasó al destino que se empeñó en unirnos.
Así fueron pasando los años sin que yo pudiera entender que te retenía a mi lado.
Hoy que se acerca mi fin, lo he comprendido todo.
Siempre estuviste enamorada de mi marido, por eso lloraste el día de mi boda, por eso has permanecido cerca.
No digas nada, ya no vale la pena, cuídale como yo lo hubiera hecho.



desasosegada

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jueves, 3 de marzo de 2011

En febrero

No va a haber fiesta de disfraces. Las máscaras que guardábamos con celo caducaron en el mismo momento en que dejamos de buscarnos. Quizás no merezcamos más carnaval que el que vivimos aquel año en que las nubes se despejaron de repente. O quizás debamos esperar al próximo febrero. Quién sabe...

Cronopio

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El olor de los naranjos al anochecer

Nací en el Mediterráneo como Serrat o Sorolla y como ellos llevo en la piel el color del sol de mayo y en el alma el gusto por la bohemia.
Lo que ocurre es que después de de pasarte la vida dando patadas a las piedras de medio mundo, uno se siente de ningún sitio o de todos, según el humor del día.
Por eso cuando me dijiste: "Hueles como los naranjos al anochecer" me sentí de nuevo en casa y supe que allá a dónde vaya, llevaré la esencia de mi tierra.


desasosegada

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Promesa cumplida

Prometió cuidarme y así fue. Lástima que mi amor agregara un siempre que él no había dicho.


Patricia Nasello

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miércoles, 2 de marzo de 2011

La boda

Me sentía como cenicienta en su cuento, sabía que cuando el reloj encendiera la mañana, mi sueño habría terminado.
Por eso acariciaba las sábanas queriendo retener su tacto, por eso me acercaba una y otra vez a tu pecho para memorizar su olor.
Aún en tu presencia, presentía ya la soledad inevitable.
El tiempo, el implacable... jugo en contra de los felices y el sol salió.
Lentamente abandoné la cama, sabiendo que hoy era el día de mi boda y el primero, del resto de mi vida, que pasaría sin ti.



desasosegada

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Flashback

No recordaba cuándo fue consciente por primera vez de aquel extraño don: cerrando los ojos en un lugar cualquiera, se le presentaba un interminable conjunto de imágenes de todo lo que alguna vez allí había sucedido.

Se hizo inspector, desmontó falsedades, supo de crímenes insospechados y fue condecorado. Pudo mantener el secreto. Una mañana se dirigió al antiguo hospital que le vió nacer, portando bastón blanco y gafas negras. Cerró los ojos y se preparó para perseguir los recuerdos olvidados.

Alsquare

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martes, 1 de marzo de 2011

Foto

La imagen sigue ahí, con la insolencia de las pasiones nuevas, juventud que se enreda desenreda soberbia entre las sábanas porque total se cree eterna y aún no sabe que se va perdiendo abrazada a sonrisas mentirosas. La imagen sigue ahí, plano cenital congelando un amor arrugado, húmedo y brillante como el blanco satén, aunque perdido, como perdieron ellos ante las sorpresas de tanto tiempo transcurrido y olvidado ya, lo que un día los llevó a protagonizar aquella foto. Pero la imagen sigue ahí.

mirina

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Pacto de silencio

Nos libramos, por fin, de los disfraces, y la certeza translúcida de nuestras pieles desnudas dejó pronto un rastro de sudor derramado y sábanas revueltas. A pesar de la muda agonía de que éramos presos, no hubo lugar para palabras vacías. Firmamos un pacto inquebrantable y dejamos que hablaran nuestros cuerpos enfebrecidos, los cuales pronto encontraron un idioma que no les era del todo ajeno, y emprendieron un diálogo que se antojó eterno en torno a la noche y al silencio.

Cronopio

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lunes, 28 de febrero de 2011

Días extraños

Envuelta con solo una sábana, camina descalza por el pasillo, dando pequeños saltitos. Las tostadas humeantes y el zumo de naranja la han despojado de un dulce sueño.
Me habla eufórica, colmada de proyectos e ideas nuevas para un futuro inmediato. Mi sonrisa viaja generosa y sorda. No consigo encajar una pieza defectuosa dentro de tanta felicidad. El destino es caprichoso.
Es Carnaval: días de jugar a ser otros, silenciando nuestras realidades en un paroxismo contagioso a la sombra de un disfraz.

21

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JUEVES DE CARNAVAL

Pelaba la naranja con la lentitud y la calma que solo los años otorgan a los dedos. Sus ojos, de azul cada vez más desvaído, miraban la nada y revivían el día en que, envuelto en unas sábanas, jugó a ser fantasma y a besarla como solo saben hacerlo los fantasmas. Su torpeza, el tropiezo en los escalones y aquel mal golpe que acabó con la vida de la muchacha le siguen manteniendo en el vacío. En la nada de aquel Jueves, como hoy, de carnaval.
Tagore123