21
Espacio de creación de microrrelatos,
cuentos cortos y otras formas de
literatura breve, al acceso de cualquiera.
sábado, 18 de septiembre de 2010
comunicación natural
Este verano en el transcurso de mi viaje, quise despejar mis dudas sobre el mito que encierran los elementos y su forma de comunicarse con nosotros.Me senté en la orilla del mar, un día en calma y otro embravecido, me dijo algo... no lo entendí. Quise hablar con el río, que es más dócil y un personaje oriundo del lugar, me dijo: El agua es orgullosa, ¡no lo vas a entender!, ¡los de ciudad habéis perdido todo contacto con la naturaleza!, ven más a menudo, que te conozca, quizás te diga algo
Otoño en el Sur
El Sur es extremo. La luz es más intensa y la lluvia no es tímida, no chispea, ni llovizna, los elementos son como los sentimientos, se muestran con todos sus excesos. El estío avisa de su marcha con tres días intensos de agua, es el llanto de nuestra melancolía recordando días interminables y tiempo libre a borbotones. Las noticias tienen rostro de muerte, las riadas suceden una vez más. El agua pasa con el título de propiedad, dicen los ancianos. Bienvenido Otoño.
veintiuno.
Desespera
Con el fuego de tu nombre abrigué mis tantas noches tristes. Pude esperarte de esa forma. Ahora, el agua de tu engaño me ahoga en el vacío cruel de tu ausencia sin final.
mirina
Fuegos artificiales
El cielo se iluminó con los fuegos artificiales. Olor a pólvora, detonaciones atronadoras, en fin, lo esperado. Todos brindando, sonrientes, encantadores. Risas, copas, baile, copas, chistes, copas, copas y más copas. Las 12, la 1, las 2, la euforia, el frenesí, el acabóse. Hay que te cojo, hay que me pillas. Más risas, que digo risas, carcajadas. Al día siguiente prendí fuego a la sala de banquetes. Por fin podría descansar.
(CORMORAN)
(CORMORAN)
El fuego lo purifica todo, eso dicen. Tenía 15 años cuando la conocí. Fue mi primer amor. Todos los días recorríamos juntos aquel breve trayecto hasta la parada del bus. Luego, en casa, estudiábamos, merendábamos y jugábamos un rato. Después te ibas y yo te imaginaba. Pero aquel día tus juegos se volvieron fogosos y me hiciste perder cualquier interés por otro juego. Purificación se llamaba, y era realmente fogosa.
(CORMORAN)
(CORMORAN)
Mar adentro
Agua, todo lo que me rodea es agua. Si me lanzo a ella y empiezo a nadar hasta agotarme, habrá tal distancia que sea imposible regresar, y allí, luchando por flotar, me mecerás, envolverás y succionarás de mi para llevarme a tus adentros. Y no sé porqué lucharé para evitarlo si lo que quiero es eso, pero no por ti, no creas, sino por dejar el resto. A ti me entrego mar adentro, y cuando te canses de mi, que lo harás, llevame a una orilla a descansar.
cormoran
cormoran
viernes, 17 de septiembre de 2010
Ventana de oportunidad
Contemplaba la noche tras la ventana impoluta. En su reflejo podía ver la mano que empuñaba la pistola, el brazo,... No alcanzaba a distinguir su cara. El disparo atravesaba limpiamente mi cabeza y el vidrio se hacía añicos. Me extrañó no despertarme sudoroso como otras veces. La certidumbre me heló la sangre.¡No había ventana en el cenador! Sentí que mi mano subía hasta notar el frío metal tras mi oreja. El disparo destrozó mis gafas. Orificio ocular de salida rezaba el parte.
Alsquare
Alsquare
Iniciación diaria
Buscaba una leyenda que me reavivara. La encontré dentro de una roca, en su interior incrustada. Cada día recorría las distintas pruebas y obstáculos urbanos, hasta llegar a la pequeña elevación dónde se hallaba. La roca parecía una peca de gigante, aunque si te acercabas, veías por un lado las arenas del desierto, por el otro la transparencia de las aguas. Allí me contemplaba, absorta, hasta que la leyenda se liberaba. Tenía mi cara. Era yo la que narraba.
Sara Lew
Todo cambia, todo cambia, nada permanece, ni tan siquiera el viernes, ese quiero y no puedo, no puedo por estar cansado, pero quiero para seguir sintiendo, no quiero para dejar de sentir, no tiene sentido, quiero dormir, bailar, olvidar, encontrar, perderme, si eso es lo que quiero, perderme en mi, solo en mi, de forma infinita, para siempre, con solo mis recuerdos, que cada vez son menos, lejanos, borrosos, me mareo, me caigo, yazo, me voy, dejo mi cuerpo y oigo mi voz, he cambiado, hola Sábado
Círculo cerrado
Despertó en la habitacion. Sin ventanas, sólo una puerta blindada. Estaba rodeada de muertos, rodeándola sentados. Gritó. La puerta se abrió y él entró despacio. -"Estan casi todos. Sólo falta uno: yo". Vio la pistola. Ella lo miró, miró la puerta sin llave... y volvió a gritar
VIERNES
!Viernes, por fin!
Me izo a los tacones y hale !A comerme el mundo!
Una copa: !demonios! que pesada está mi amiga con su pisito.
Dos copas: Y ahora no me faltaba más que este dandome la chapa con su ex.
Tres copas: me duelen los pies, ya lo sabía yo.
Lo que me temía, el mundo me ha comido a mi", pa casa.
!Me han robado la moto"
Viernes
Me izo a los tacones y hale !A comerme el mundo!
Una copa: !demonios! que pesada está mi amiga con su pisito.
Dos copas: Y ahora no me faltaba más que este dandome la chapa con su ex.
Tres copas: me duelen los pies, ya lo sabía yo.
Lo que me temía, el mundo me ha comido a mi", pa casa.
!Me han robado la moto"
Viernes
El exhibicionista
Abres tu gabardina mostrándome tu desnudez, que apenas veo con los ojos tapados por mis manos temblorosas. Pero no puedo despegar mi cara de la ventanilla, que empieza a moverse con el tren. Te observo ya lejano y tú sigues estático en el andén, descubriéndote a mí sin pudor mientras pasa la gente a tu lado, sin verte.
Sara Lew
PERSONAJES Y PERSONAS
Puedo estar horas en la VENTANA imaginando la vida de los que pasan. Aquel señor de la gabardina ha comprado un cachorro a su hijo, que le terminará mordiendo. Ese de la bufanda que coge el taxi es químico y estudia un medicamento que salve a su padre enfermo. Aquella joven rubia conocerá hoy a su amante definitivo; un flechazo de los de antes. Sus tacones repiquetean por la acera hasta detenerse ante mi portal. Suena mi portero automático. Es ella.
Mares de ventana
Mi ventana guarda tantos mares... el suave y brumoso de otoño. El blanco de la tramontana. El montañoso de noviembre. El acerado de invierno. O el raro mar de las colinas nevadas. El mar rosado de los atardeceres rojos. El de cigüeñas y flamencos. Y ese cálido, tentador mar de julio, cerrado por bancos de medusas. Muchos mares, tantos mares, cada uno diferente. Pero nunca, nunca hasta que vi tus ojos, había tenido un mar de la pasión.
mirina
jueves, 16 de septiembre de 2010
reconciliación.
Si te quedas, te susurraré secretos al oído. Me esconderé en los recovecos de tus elipses. Acamparé en un rincón de tus sueños más prohibidos. Si no te vas, me convertiré en la sombra de tu sombra, en guardián de tus horas y testigo de tus instantes, prometiendo solapar tus días.
veintiuno.
Post it
Oye, a ti te hablo. No me ignores otra vez. Estoy aquí pegado. Soy cuadrado y amarillo, como la esponja con pantalones que me sujeta con su imán. Tengo un mensaje para ti. Pero tú no paras de dar vueltas alrededor del teléfono esperando noticias suyas, preocupado. Y yo llevo llamándote desde ayer, cuando Pablo escribió en mí: "Papá, recógeme después del partido. Salgo tarde y ya está oscuro."
Sara Lew
Amor con stylo
En su huída de lo cotidiano topó con ella. Los encuentros le hacían escapar de la realidad encerrándolos en una intensa relación. Destapada, sentía su humedad rezumar aquel olor tan característico y lo animaba para comenzar de nuevo la danza creativa. A menudo se preguntaba qué manos habrían acariciado aquella estilográfica de elegantes formas pegada a su corazón.
alsquare
alsquare
guerra
El su último abrazo, vacío de pensamientos, alzó la voluntad sobrevolando el sentimiento. Antes de desaparecer completamente miró fijamente a su hijo, en silencio, posó su firme mano en la cabecita y tragando saliva marchó. Ahora, es un número anónimo de muerte... y el nombre de una calle en el pueblo que nació.
veintiuno.
JUEVES
No me fue fácil llegar a tiempo, créanme.
Tuve escaquearme de mi jefe, bajar doce pisos a la carrera, saltarme tres semáforos y esquivar a una multitud que se agolpaba en Callao.
Pero el esfuerzo compensó
Es Jueves y aborrezco no llegar a tiempo para probar la paella.
Tuve escaquearme de mi jefe, bajar doce pisos a la carrera, saltarme tres semáforos y esquivar a una multitud que se agolpaba en Callao.
Pero el esfuerzo compensó
Es Jueves y aborrezco no llegar a tiempo para probar la paella.
TODO
Intentaba razonar. Sabía que el suicidio no era la solución; sólo supondría la confirmación pública de su debilidad y su cobardía. No le devolvería a Rosa. No solucionaría la deuda del bar. Ni su cojera definitiva, ni la inquina de su hija. Lo perdería todo. Todo. Abrió la VENTANA.
juanxxi
Re-Encarnación
La agonía acabó, algo falló en su organismo y su corazón, por fin, se paró. Vio el túnel, y la luz al final. Comenzó a caminar y notó que, paulatinamente, olvidaba su vida. Corrió buscando la luz. La razón huía. Oyó voces. Lloró, pero no entendió la voz que decía: "¡es una niña!"
Por Hank66
miércoles, 15 de septiembre de 2010
In vino veritas
La oscura bodega rezumaba humedad. El enólogo dejó la copa en la mesa. -¡Un vino excelso! ¿Cúal es su secreto? El bodeguero replicó, sonriente: -Hacemos sacrificios. -Mucho trabajo, ¿no? -Sí, trabajo...y sacrificios, respondió, mientras unas sombras aparecían tras las barricas.
Por Hank66
tiempo
Como todos los años, antes de Navidad, tengo que etiquetar y preparar los relojes nuevos para la venta. Ya de paso, los observo, e imagino la vida que les esperan. Los hay sofisticados, deportivos, extravagantes, clásicos. Todos señalan el tiempo, nos recuerdan cual es nuestra mayor limitación y nuestro mayor regalo, si sabemos que hacer con el. Yo me voy a colocar este.... que no iré a casa a dormir.
veintiuno.
soledad calculada
El aeropuerto estaba saturado y allí estaba el, solo; con la firmeza que da la experiencia, en la cola de embarque. A un destino perfectamente elegido, como todo en su vida. Impoluta, organizada, ajustada, no dejando nada al azar. Necesidad imperiosa para que algo funcione. Alzó mecánicamente la mano para mirar la hora, solo se fiaba de su reloj. Al fin y al cabo estaba solo.
veintiuno.
fuego mojado
Últimamente llegaba antes a casa, había recuperado parte de su encanto, era más atento, volvía a opinar. De nuevo habitaban sus sorpresas mágicas, regadas con humor dulce. Me sentía viva de nuevo. Pero ya no hay remisión, el fue quién dejó apagar la última llama. Y más a sabiendas de que su comportamiento, obedece a la certeza de que sabe que hay otro hombre. No existe tiempo.
veintiuno.
Tiempo en casa
Desmenuzas el tiempo con la comida de tu bebé. Lo troceas con la comida del mayor. Lo condimentas con la cena de tu marido que llega otra vez tarde. Lo envenenas con los celos y la insatisfacción que ingieres. Lo matas con una pastilla para dormir.
Sara Lew
Belleza
Gozaba de una belleza intrínseca; una elegancia integrada en una naturalidad que desafiaba a la propia naturaleza. Era de una sencillez salvaje; una fidelidad divina a la sinceridad. Creo poder afirmar que se trataba de un monumento casi feroz a la pureza.
Por eso, fue una lástima que aquel copo de nieve estuviera destinado a chocar contra la hipócrita perfección del gris del asfalto
Por eso, fue una lástima que aquel copo de nieve estuviera destinado a chocar contra la hipócrita perfección del gris del asfalto
Blastocito
"Recién pintado"
"Recién pintado" rezan sus coloretes. Es miércoles, 8 de la mañana y tiene 3 llaves en la mano. Cuando entre en la oficina Javier leerá claramente el cartel que cuelga de sus pómulos. Eso será a las 9. A las 10.30 cogerá un avión rumbo a Roma.Después esterilizará los relojes, se quitará el maquillaje y entonces sí, se dejará besar por la ciudad eterna (y puede que también por Enzo)
gustarse
Tembloroso, observado, tenso... empezó a escribir un relato con la duda de la inexperiencia, cuando creyó que había terminado, tuvo que acortarlo en menos de la mitad. Pensó en dejarlo. La poda le hizo ganar firmeza y claridad. Ahora intenta difundirse, lo más importante ya lo ha conseguido... creer en si mismo.
veintiuno
MIERCOLES
Somnolienta, me arrellané en el autobús, dispuesta a dar rienda suelta a mis sueños.
De pronto, al abrirse las puertas, apareció .... él y la vida se iluminó.
Bajé en mi parada notando que me taladraba su mirada.
Sin pensarlo, eché a correr tras el bús y logré alcanzarlo, dentro sólo me esperaba un anciano con bigote.
Era miercoles.
Desasosegada.-
De pronto, al abrirse las puertas, apareció .... él y la vida se iluminó.
Bajé en mi parada notando que me taladraba su mirada.
Sin pensarlo, eché a correr tras el bús y logré alcanzarlo, dentro sólo me esperaba un anciano con bigote.
Era miercoles.
Desasosegada.-
Dos ventanas
Si me dejaran mirar desde la otra ventana tampoco me levantaría. Puede que crean que me quedo aquí por evitar el calabozo, pero la verdad es que prefiero esta. Aunque me quede sin paisaje cuando apagan la luz o parpadeas.
Pollokongrio02
martes, 14 de septiembre de 2010
NIETAS
El portero del edificio de enfrente me dijo que se llama Amaya y que tiene la edad de la más pequeña de mis nietas. No podría reprocharla su gusto por las aventuras amorosas con otras mujeres, porque yo también tuve alguna experiencia de ese tipo tras la muerte de Bernardo, pero me molesta ver desde mi VENTANA como, de madrugada, las echa de su cama y de su casa como si fueran delincuentes. Si me la encuentro en la calle, no pienso confesarle mi desaprobación.
juanxxi
juanxxi
regresar
El camino de vuelta, el regreso. Es el sueño sin fin; es la eterna búsqueda de lo que hemos ido dejando por el camino, de un bucear en la memoria, de todo lo que pudimos ser y no fuimos capaces de darnos. Es el refugio de amores antiguos, amigos abandonados, ideas sin exponer, de lo que un día soñamos y no seremos.
veintiuno
desaparecer
Cuando abrió los ojos lentamente, escudriño, se orientó. Un día comenzaba de nuevo. Había sufrido de nuevo una tormenta de pesadillas, trastornos bipolares e histeria. No reconocía a nadie en el sitio donde creía estar hospedado, nadie se hablaba, ni relacionaba. Le provocaba miedo, pero solo quería dormir. Se asomó aturdido a la ventana de la planta diez y reconoció escenas cotidianas que alguna vez le fueron propias.
instinto
Me entrego de nuevo. Reina en mí, una sinrazón de la que me siento esclava y de la que no me quiero escapar. Mezclamos nuestros fluidos y olores hasta no saber quién es quién. Solo me importa el presente y el ahora. Me duele todo el cuerpo, pero estoy saciada, muy satisfecha. Más me duele volverme a poner la careta tras la que me escondo, para poder existir un sinvivir. Discretamente y serena, vuelvo a casa.
veintiuno
Ventana
Llevaba magistralmente sus vidas paralelas. En un exceso de confianza, perdió la perspectiva y se produjo la convergencia en un punto, intentó recomponerlas pero solo consiguió que la divergencia fuera mayor. Desde entonces mira por la ventana al infinito esperando la llegada de otro barco.
RubiadeBote
MARTES
Aquel día era martes, como hoy, como la septima parte de los dias de mi vida.
Revolví el bolso con la sensación de que me olvidaba algo.
Llegaba tarde al curro y hacía frío, así que me ajusté el casco y aceleré.
En la segunda curva descubrí lo que me había dejado en casa: el futuro.
Desasosegada
Revolví el bolso con la sensación de que me olvidaba algo.
Llegaba tarde al curro y hacía frío, así que me ajusté el casco y aceleré.
En la segunda curva descubrí lo que me había dejado en casa: el futuro.
Desasosegada
Funeral
Llegó a casa de noche, se quitó el incómodo traje y se metió en la cama. Sintió las sábanas húmedas. Ella se giró, muy despacio -¿Cómo ha ido el entierro? -Bien, todo el mundo se tragó lo del suicidio. Por cierto, estás horrible. -Bueno, quizás no debiste dispararme en la cara.
Por Hank66
Nieve
Aquel día, por fin, no amaneció. Se abrazaron llorando, al lado del árbol de Navidad que habían puesto hacía apenas unas semanas. El niño los llamó desde el salón. -¡Papá, mamá, venid, están cayendo copos pequeñitos! El hombre cogió una pastilla, un vaso con agua, y se levantó.
Por Hank66
Mejor callado
Todos los días, todos, a la misma hora, sin importar el día de la semana ni el mes, la veía sacudir ropa blanca desde su ventana. Una mañana la reconocí en la tienda del barrio.
- ¿Qué, vienen los indios? – pregunté, intentando resultar simpático.
Me respondió con una mirada ausente.
– Lo digo por las señales que envía... – insistí.
Sin decir nada, bajando la vista, dejó caer cesta de plástico y se marchó.
– No debió decirle eso – me recriminó el tendero desde el mostrador -, perdió a su hijo recién nacido por una picadura de avispa en el cuello. Desde entonces se pasa horas sacudiendo la ropa de su cuna.
No existe un hoyo lo suficientemente profundo donde me hubiera gustado desaparecer.
- ¿Qué, vienen los indios? – pregunté, intentando resultar simpático.
Me respondió con una mirada ausente.
– Lo digo por las señales que envía... – insistí.
Sin decir nada, bajando la vista, dejó caer cesta de plástico y se marchó.
– No debió decirle eso – me recriminó el tendero desde el mostrador -, perdió a su hijo recién nacido por una picadura de avispa en el cuello. Desde entonces se pasa horas sacudiendo la ropa de su cuna.
No existe un hoyo lo suficientemente profundo donde me hubiera gustado desaparecer.
Rodia
lunes, 13 de septiembre de 2010
A la luz de la oscuridad
Abrió su ventana a la oscuridad y la habitación se llenó de luz "¡mierda!" Allí estaba de nuevo. Estaba seguro de que la noche anterior había encontrado el momento oportuno, que tras haber dialogado largo y tendido había logrado convencerla, pero no, los latidos de su corazón hacían evidente su presencia ; jamás vislumbró la guadaña entre tanta negrura.
Esta noche probaría con cinco somníferos más.
Esta noche probaría con cinco somníferos más.
Blastocito
Reconocimiento
Caía la tarde y la lluvia con ella. Le pesaba más el agua de su sombrero que la oscuridad recién estrenada. Le gustaba saberse irreconocible con su gabardina larga hasta las botas, su aspecto era de lo más común en ese ambiente húmedo y frío de otoño. Su fama se ocultaría fácilmente entre esas callejuelas malolientes de los suburbios. Entró al cuartucho que había alquilado después de que le dieran el premio que colgaba, enmarcado, de la pared. Se sentó a contemplarlo. Había trabajado toda su vida para recibir el reconocimiento al mejor agente secreto.
Sara Lew
ventana
Me sentía como un cerebro posado en una cama. El resto de mi cuerpo no lo veía, por lo tanto no estaba, ni contaba con el. Los demás si daban cuenta de su cuidado, como el que limpia un pedestal para que el busto se sienta a gusto. Solo pedí un deseo y es que nunca me cerraran la ventana de mi cuarto. Nunca le di la importancia que ahora tiene. Es mi única conexión con el resto del mundo.
veintiuno
LUNES
Aquel día era lunes, como hoy, como la séptima parte de los días de mi vida.
Abrí la puerta para que entrara la primavera y entraste tú, con cara de invierno mal cicatrizado.
Hoy mientras saco la chaqueta, siento que ya no me abrigas.
Es lunes y vuelvo a estar sola.
Desasosegada.
Reflexión
Entro al coche por inercia, aletargado y con los últimos restos de sonidos memorizados. Treinta kilómetros me separan de mi mullida cama. Mi estado de hipnagogia me hace sentir la pérdida del contacto con el suelo y los múltiples golpes se suceden. Silencio, oscuridad, duda, miedo, dolor... intensas sensaciones en soledad. Dos luces se acercan con celeridad en el vértigo de la obnubilación. Siento un contacto en la espalda y me vuelvo, contestando: ¡No, gracias, no quiero más!.
veintiuno
Presentimiento
Estaba solo en una casa colgada de la ladera de un monte a 70 kilómetros de la civilización. La noche estaba serena. El viento en calma. Había apagado la música y esperaba sentado en el sillón, frente a la VENTANA abierta, con la seguridad de que aquella luna llena planeaba algo.
juanxxi
domingo, 12 de septiembre de 2010
Pesadilla
Despertó dentro del féretro. Intentó moverse, pero apenas pudo rebullirse un poco, atrapado por el blando acolchamiento de la madera. Gritó y gritó durante unos segundos, golpeando la tela, hasta que se dejó caer laxo hacia atrás. "Joder, qué pesadilla". Cerró los ojos de nuevo.
Hank66
Hank66
DIFUNTO
Le aplicaron estrictamente la tradición del santoral. Nació un 1 de noviembre en La Riera. Se llamaba Difunto, y mientras envolvía el queso de sus cabras con un papel de periódico amarillo, entre las melladuras de sus dientes se le escapaba la vida.
Conductores
Comenzó a ver los coches cuando era muy pequeño. Antes le asustaban la sangre y la cara ausente de los conductores, mientras buscaban aparcamiento. Ya se ha acostumbrado, aunque no puede evitar un leve estremecimiento al verlos. Cuando llega la Operación Retorno se queda en casa.
Arrojo
Un golpe de mar lo confinó inválido en tierra firme. Su único familiar no pudo acogerle pero le agradecíó que hubiera gestionado aquella habitación de la residencia. Todas las noches repetía el ritual atando al sedal el cuaderno y el lápiz. Tras soltar pita por la ventana ejercitaba su paciencia hasta cobrar presa. Era frecuente que la marquesina no se vaciara a la llegada del bus. En la portada podía leerse: "Relatos de un lobo cazado".
Alsquare
Alsquare
Suscribirse a:
Entradas (Atom)